Artículo de Investigación

Factores de riesgo asociados al uso y consumo de drogas en estudiantes del Instituto Superior Tecnológico Sucre

Risk factors associated with the use and consumption of drugs in students of the Institute Superior Technologic Sucre

Darwin Noroña Salcedo
Instituto Superior Tecnológico Sucre, Ecuador
Verónica Mosquera Hernández
Instituto Superior Tecnológico Sucre, Ecuador
Vilma Laica Hernández
Universidad Andina Simón Bolívar, Ecuador

Ecuadorian Science Journal

GDEON, Ecuador

ISSN-e: 2602-8077

Periodicidad: Semestral

vol. 5, núm. Esp.3, 2021

esj@gdeon.org

Recepción: 23 Agosto 2021

Aprobación: 04 Octubre 2021



DOI: https://doi.org/10.46480/esj.5.3.141

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Como citar: Noroña Salcedo, D., Mosquera Hernández, V., & Laica Hernández, V. (2021). Factores de riesgo asociados al uso y consumo de drogas en estudiantes del Instituto Superior Tecnológico Sucre. Ecuadorian Science Journal, 5(3), 12-26. DOI: https://doi.org/10.46480/esj.5.3.141

Resumen: La presente investigación tiene como objetivo determinar los factores de riesgo asociados en el uso y consumo de drogas en estudiantes del Instituto Superior Tecnológico Sucre (ISTS). El estudio realizado tuvo un enfoque cuantitativo con diseño no experimental, transversal, descriptivo y correlacional. A una muestra de 1755 estudiantes universitarios se les aplicó la Encuesta Socioeconómica ISTS y la encuesta EST-Diagnóstico de la situación del consumo de alcohol, tabaco y otras substancias psicoactivas en la comunidad universitaria de la Universidad Central del Ecuador, confirmándose la inferencia a través del estadístico Chi cuadrada y la razón de momios para el grado de asociación. Como resultados se obtuvo que las amistades, conflictos laborales y el tiempo libre destinado a fiestas y ocio están asociadas con el consumo de tabaco y alcohol. Por otro lado, factores como la relación con la familia y necesidad de aceptación social infirieron con el consumo de cocaína. Se concluye que los factores nominales de género, autoidentificación, ingreso mensual y responsabilidad de la familia obtuvieron asociación baja, y que la predicción de consumo obedece a la influencia de las amistades, conflictos laborales, y necesidades de aceptación.

Palabras clave: Consumo de drogas, estudiantes universitarios, factores de riesgo.

Abstract: The present research aims to determine the risk factors associated with the use and consumption of drugs in students of the Instituto Superior Tecnológico Sucre. The study carried out had a quantitative approach with a non-experimental, cross-sectional, descriptive and correlational design. The ISTS Socioeconomic Survey and the ISTS Drug Use and Consumption Sheet of the ISTS validation (DUSI) were applied to a sample of 1755 university students, confirming the inference through the Chi-square statistic and the odds ratio for the degree of association. As results, it was obtained that friendships, work conflicts and free time devoted to parties and leisure are associated with the consumption of tobacco and alcohol. On the other hand, factors such as the relationship with the family and the need for social acceptance were inferred with cocaine use. It is concluded that the nominal factors of gender, self-identification, monthly income and family responsibility obtained low association, and that the prediction of consumption is due to the influence of friends, labor conflicts, and acceptance needs.

Keywords: Drug use, university students, risk factors.

Introducción

En la actualidad, el consumo de drogas y alcohol se manifiesta como una problemática que ha ido aumentando progresivamente, a nivel mundial. Teniendo en cuenta además que el abuso de sustancias estupefacientes son factores de riesgo para el cometimiento de actos violentos, para la ocurrencia de enfermedades crónico degenerativas y para la siniestralidad vial; el Estado ha enfocado sus esfuerzos por mitigar su uso y consumo a través de creación de política pública intersectorial basada principalmente en la educación y prevención de la población. La relación entre su uso y la ocurrencia de delitos que tienen como saldo negativo la inseguridad y los asesinatos en el país, coinciden con el dispendio de alcohol y drogas ilegales de los agresores en el 88% de los casos (El Telégrafo, 2021). Al mismo tiempo, la violencia en la vida conyugal o en pareja responde a una influencia del alcohol hasta en el 40% de los altercados. El uso frecuente que ocasiona su dependencia compulsiva se manifiesta tiempo después en enfermedades cardíacas, cáncer, enfermedades pulmonares y patologías mentales (Laita, 2018). Con respecto a los accidentes de tránsito, una de cada cuatro personas fallece en las vías por conducir bajo los efectos del alcohol. La facilidad de distracción, la disminución en la capacidad de reacción y la sobrevaloración de las habilidades de los conductores en estado de embriaguez, también causan incapacidades permanentes con costos altos en pensiones, subsidios e indemnizaciones para las familias y el estado (Muñoz, 2018).

Con respecto a la legislación, la ley ecuatoriana ha sufrido algunas reformas desde principios del siglo xx, y es que en 1916 se expide la Ley de control del opio, en 1924 la Ley sobre la importación, venta y uso del opio, sus derivados y de los preparados de la morfina y de la cocaína, en 1958 la Ley sobre el tráfico de las materias primas, drogas y preparados estupefacientes, en 1974 la Ley de control y fiscalización del tráfico de estupefacientes. En todas ellas se reprimía moralmente con sanciones pecuniarias y privaciones de libertad el uso y consumo de las sustancias psicotrópicas bajo un evidente sistema de control punitivo y coercitivo (Álvarez, 2019). A principios del siglo xxi, la legislación ecuatoriana, que contenía las penas más drásticas para la tenencia de drogas en América Latina, concedió en 2008, reformas constitucionales, cuyo nuevo enfoque, impide la criminalización y la vulneración de derechos (Constitución de la República del Ecuador, 2008).

La dependencia gubernamental encargada de implementar la gestión fue la Secretaría Técnica de Prevención Integral de Drogas (SETED) que el 23 de abril 2018 fue suprimida por decreto ejecutivo 376, pasando las competencias al Ministerio de Salud Pública. No obstante, la desaparecida SETED en junio de 2017, presentó un plan de trabajo integral 2017 – 2021 con base a un diagnóstico de varios estudios en colegios, universidades y empresas con participación de actores claves como profesionales de la salud. Si bien en este documento y sus estudios anexos no existe detalle explicativo de los factores asociados con el uso y consumo, arrojan datos descriptivos importantes desde el año 2012 (Seted, 2017).

El inicio aproximado de consumo empieza desde los 12 a 14 años de edad y continua hacia los 21 años. Los alumnos del Instituto Superior Tecnológico Sucre (ISTS) lugar en dónde se realizó el presente estudio, se encuentran dentro de este rango etario. El acceso fácil al mercado de la droga aumenta las posibilidades de consumo y de dependencia entre los estudiantes además que su uso se asocia directamente con situaciones de violencia, deserción escolar y delincuencia. Con referencia a lo anterior, los jóvenes de 17 a 24 años de edad, alguna vez han consumido alguna droga en su vida incluyendo cocaína, marihuana u otra sujeta a control y fiscalización.

Respecto al consumo del alcohol, los informes de la Organización Panamericana de la Salud (2015), señalan que que un mayor porcentaje de hombres que mujeres mueren por causas relacionadas con el alcohol - 7,6 % de los hombres y 4% de las mujeres -, aunque hay evidencia de que las mujeres pueden ser más vulnerables a los efectos nocivos del alcohol en comparación con los hombres. Los autores señalan también que existe preocupación por el aumento constante en el consumo de alcohol entre las mujeres. A esto se suma que el consumo de alcohol estaría siendo un factor importante para el desarrollo de 200 enfermedades y trastornos físicos. Si se compara la ingesta de alcohol en América latina, el Ecuador está entre los tres países que más la consumen por detrás de Chile y Colombia, la tasa oscila entre los 9 litros de consumo de un individuo al año.

La marihuana es una sustancia sujeta a fiscalización cuyo consumo anual alcanza las 48 toneladas de acuerdo con la Dirección Nacional de Antinarcóticos (2018), de alta demanda en población universitaria y su legalidad está en los 10 gramos para consumidores habituales. La administración terapéutica del fármaco ha demostrado clínicamente ser efectivo para el dolor crónico en pacientes terminales, para impedir el daño del nervio óptico en algunos casos de glaucoma, para la disminución de convulsiones en casos de epilepsia y sigue en debate su acción frenadora en el desarrollo de cáncer. Posiblemente, estos aspectos positivos de la marihuana medicinal obnubilen la conciencia de los efectos nocivos sobre la salud que caracteriza a esta substancia sobre todo en la población más joven, Para ilustrar, la tetrahidrocannabinol (THC) compuesto psicoactivo del cannabis, altera el funcionamiento de la esfera socio afectiva por lo que está muy relacionado con trastornos como depresión, ansiedad, nerviosismo, psicosis, suicidio y trastornos de personalidad. También están las enfermedades pulmonares, cardíacas y el cáncer de páncreas, entre los padecimientos de orden físico. El riesgo de problemas mentales graves se incrementa con la menor edad de consumo y la inestabilidad familiar característica de la adolescencia y de adultos jóvenes (Castañeda, 2020).

Con respecto a la cocaína, opioides, y metanfetaminas, el porcentaje de consumidores es muy inferior al registrado en alcohol, cigarrillo y marihuana. Una explicación de este fenómeno se encontraría en el precio de adquisición del estupefaciente. Mientras un gramo de marihuana cuesta 2 USD, el mismo gramo de cocaína se consigue en hasta en 30 (El Telégrafo, 2021). La adicción y los efectos de la cocaína en la salud suelen ser más agresivos que la marihuana. La esquizofrenia paranoide y la psicosis son las enfermedades más ligadas con su consumo, y en referencia a problemas físicos, se puede detallar destrucción de las vías aéreas superiores, neumonía, y problemas digestivos (Gerrón, 2016).

Es por eso que el Comité Interinstitucional de Prevención Integral del Fenómeno Socio Económico de las Drogas y de Regulación y Control del Uso de Sustancias Catalogadas Sujetas a Fiscalización (anteriormente SETED) dentro del ámbito de su competencia y en virtud de la Ley Orgánica de prevención; regula coordina y articula en todas las casas de educación superior la implementación de programas y planes de prevención de consumo. Al respecto cabe señalar que dichos esfuerzos no solucionan la problemática, puesto que los Institutos de Educación Superior no cuentan con los diagnósticos que les permitan tener una línea base de indicadores que ilustren la realidad del uso y consumo de drogas de la comunidad educativa. Más aún, el desconocimiento de los factores asociados impide gestionar las probabilidades de recudir ese consumo; y esta es la principal causa para que dichos programas de mitigación fracasen y no dejen de ser meros esfuerzos repetitivos que las unidades de bienestar institucional realizan con el único afán de cumplir, pero que no se acercan en nada a resolver el problema (Kuri, 2021).

De lo anteriormente expuesto, la identificación de los factores de riesgo del uso y consumo de drogas en una Institución de Educación Superior supone no solamente establecer la línea base de consumo, el detalle descriptivo del tipo de droga, la frecuencia, las diferencias etarias, socioeconómicas o de género; sino la determinación de cómo las características de vida y educación se encuentran asociadas a conductas consuetudinarias de uso y abuso de sustancias. De ahí su utilidad, puesto que el establecimiento de estos factores permitirá a la postre diseñar estrategias exclusivas encaminadas a la disminución de la probabilidad de consumo; y al mismo tiempo, fortalecer aquellos factores protectores eugenésicos que disminuyen ostensiblemente la probabilidad del uso de drogas en programas efectivos susceptibles de ser medios y evaluados.

En tal virtud, este estudio tuvo el objetivo de determinar el grado en el que los factores socio económicos se encuentran asociados con el consumo de alcohol, cigarrillo, marihuana y cannabis en los estudiantes del ISTS durante el semestre 2020 ii. Para tal propósito se describieron las variables sociodemográficas nominales, se evaluó el porcentaje de consumo y se construyeron los marcos teóricos y metodológicos sobre los cuales se interpretaron los resultados finales.

Materiales y métodos

El diseño del estudio fue no experimental, transversal, descriptivo y correlacional. La investigación fue no probabilística y se planificó contar con la totalidad del universo, 2545 estudiantes matriculados en el semestre 2020 II en el ISTS. Sin embargo, al aplicar los criterios de selección se obtuvo una muestra final de estudio de 1755 alumnos. Como criterio de inclusión, se consideraron a los estudiantes de las diez carreras del ISTS y de todos los semestres para el período escolar anteriormente señalado. Se excluyeron a los estudiantes que no estaban matriculados en el momento del levantamiento de información y que no hayan firmado el consentimiento informado; y se eliminaron a quienes no completaron de manera completa los dos instrumentos de medición.

La encuesta socio económica ISTS es un instrumento institucional de 80 preguntas, de sondeo auto administrado a través de encuesta Google Forms en el momento de la matrícula, que explora información categórica nominal dispuesta en 4 ejes: indicadores de eficacia profesional, datos descriptivos, necesidades educativas especiales y datos de vida familiar - trabajo. La información recolectada permite a la Coordinación de Bienestar Institucional identificar necesidades educativas especiales, condiciones de ingresos y gastos, números de contacto en caso de emergencia, género y auto identificación étnica. Al ser un instrumento que mide condiciones y no categorías ordinales, sus resultados son expresados en porcentajes y frecuencias sin necesidad de usar baremos.

Por otro lado, la encuesta EST-Diagnóstico de la situación del consumo de alcohol, tabaco y otras substancias psicoactivas en la comunidad universitaria, fue elaborada por la Universidad Central del Ecuador (2000) y evalúa el consumo en el último mes, el deseo de consumo y los problemas de consumo en alcohol, cigarrillo, marihuana y cocaína. En el análisis de este estudio no se toma en cuenta los resultados de otras drogas como opiácidos, anfetaminas, inhalantes sedantes y alucinógenos. Por otra parte, la segunda dimensión del test evalúa los factores asociados al consumo como problemas de estudios, agrado de la carrera, cantidad de amistades, aceptación social y conflictos laborales. La última dimensión es el número de horas dedicadas al tiempo libre: a la televisión, deportes, programas, actividad física, fiestas, escuchar música, visitar amigos, redes sociales, paseos - excursiones y juegos de azar. Con relación a la fiabilidad del predictor, el alfa de Crombach fue alto con un valor de 0,82. Para el proceso de calificación del instrumento, se calcularon las frecuencias de los resultados del primer, segundo y tercer grupo de preguntas relacionas con el consumo en el último mes, el deseo de consumo y los problemas de consumo. Las respuestas en los tres grupos pueden ser: diariamente, semanalmente, una vez y nunca. Para la última dimensión, puede haber 4 posibles respuestas: no le dedica tiempo, entre 0 a 1 hora, entre 1 a 3 horas y más de 3 horas.

Se realizaron 3 tipos de análisis estadísticos. El primero descriptivo, permitió confirmar los porcentajes y frecuencias de los resultados de los factores socio económicos de la primera encuesta y de las tres dimensiones del segundo instrumento. En segundo orden, se aplicó la Chi cuadrada para determinar las relaciones estadísticamente significativas entre las variables nominales con la encuesta de drogas. Consecuentemente, la utilización de esta misma prueba permitió relacionar el tiempo libre y los factores asociados con la frecuencia / intensidad de consumo de la encuesta de drogas. Para ambos casos, el nivel de significancia calculado fue de 0,05. Complementario a la chi cuadrada, se utilizaron los estadísticos de V – Crammer y Gama con el objetivo de comprender la fuerza e intensidad de las asociaciones. La investigación se basó en la hipótesis de que valoraciones altas en el agrado de la carrera, cantidad alta de amistadas, alta aceptación familiar y bajos conflictos laborales, estarían relacionados con baja frecuencia y/o intensidad de consumo de las sustancias estupefacientes. Para finalizar el análisis, se calculó el Odd Ratio o razón de momios para confirmar la probabilidad de ocurrencia de las inferencias estadísticas. En este mismo punto, se generaron tablas de 2 x 2 en los cuales se conformaron grupos de expuestos y no expuestos. En las dimensiones de consumo en el último mes, deseo de consumo y problemas de consumo, las respuestas diariamente, semanalmente y una vez, fueron consideradas como presencia de consumo, presencia de deseo y presencia de problemas respectivamente. Las agrupaciones de las respuestas nunca, pasaron a demostrar ausencia de consumo, ausencia de deseo y ausencia de problemas. Para la última dimensión del tiempo libre, no le dedica tiempo y entre 0 a 1 hora, corresponde al no uso de tiempo, y entre 1 a 3 horas y más de 3 horas indican tiempo de dedicación.

En cuanto a las consideraciones éticas, se tuvo en cuenta para las encuestas, una pregunta adicional en la que los participantes aceptaban el consentimiento informado, así como el propósito y alcances de la investigación. Se resaltó en todo momento, la confidencialidad de los datos suministrados y que los resultados servirían para la implementación de planes de mejora de la comunidad educativa.

Resultados

Encuesta Socio económica ISTS, variables sociodemográficas

Tabla 1
Resultados Encuesta socio demográfica ISTS
GÉNERO Fr - porcentaje
FEMENINO 752 42,8%
MASCULINO 1003 57,2%
EDAD Fr - porcentaje
0 - 17,0 5 0,3%
18,0 - 26,0 1498 85,4%
27,0 - 35,0 201 11,5%
36,0 - 44,0 42 2,4%
45,0 - 53,0 9 0,5%
ETNIA Fr - porcentaje
Mestizo 1655 94,3%
Indígena 52 3,0%
Afroecuatoriano 32 1,8%
Blanco 9 0,5%
Montubio 7 0,4%
ESTADO CIVIL Fr - porcentaje
Soltero/a 1553 88,5%
Casado/a 121 6,9%
Unión Libre / Unión de Hecho 62 3,5%
Divorciado/a 19 1,1%
DISCAPACIDAD Fr - porcentaje
Presenta discapacidad 16 0,9%
No presenta 1739 99,1%
TRABAJO Fr - porcentaje
Si trabaja 356 20,3%
No trabaja 1399 79,7%
Elaboración propia1 X=1755

La edad que más se repitió es 20 años, cincuenta por ciento de los estudiantes están por encima de los 22 y el restante lo están por debajo del valor. La media de la edad fue de 22,84 del cual se desvían en promedio 4,6 años. la curva de distribución fue no paramétrica, con una segmentación de 0,000 en la prueba de Kolmogorov-Sminorv. Más del 85% se ubican en el rango de edad de 17 a 26 años. En cuanto a la discapacidad, 5 personas registraron disminución auditiva, 4 intelectual, 1 psicosocial y 6 personas visual. Los estudiantes que se encuentran trabajando, el 81,3% corresponden al sector privado y el 18,7% al público. El 73% tienen relación de dependencia.

Tabla 2.
Eficacia professional
Materias repetidas 2017 i 2017 ii 2018 i 2018 ii 2019 i 2019 ii 2020 i 2020 ii
No repitió ninguna 1635 (93%) 1648 (93%) 1575 (89%) 1533 (87%) 1498 (85%) 1443 (82%) 1469 (83%) 1555 (88%)
1 materia 61 (3%) 60 (3%) 96 (5%) 126 (7%) 140 (8%) 159 (9%) 173 (9%) 104 (5%)
entre 2 a 4 materias 56 (3%) 44 (2%) 79 (4%) 88 (5%) 108 (6%) 137 (7%) 95 (5%) 80 (4%)
más de 4 materias 3 (0,2%) 3 (0,2%) 5 (0,3%) 8 (0,5%) 9 (0,5%) 16 (0,9%) 18 (1,0%) 16 (0,9%)
Elaboración propia2 X=1755

Los estudiantes que no repitieron ninguna materia, disminuyeron 11,7% desde el período 2018 ii, hasta 2019 ii; aquellos que arrastran una materia, han aumentado desde 2017 ii en promedio 1,3% Los repetidores entre 2 a 4 asignaturas han ido aumentado desde el 2018 ii a un ritmo de 1,3% hasta 2020 i, punto en el que decrecen hasta 3,2%. En más de 4 materias, se presenta una tendencia al alza con promedio del 0,1% hasta 2020 i donde disminuyen en 0,11%. Con diferente magnitud, el promedio de todos los registros es negativo, empero, en los dos últimos semestres ha habido menos materias reprobadas.

Tabla 3.
Consumo, deseo y problemas asociados al uso de substancias
Consumo en el último mes Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
DIARIAMENTE O CASI DIARIAMENTE 13 (0,7%) 7 (0,4%) 3 (0,2%) 2 (0,1%)
SEMANALMENTE 56 (3,2%) 72 (4,1%) 7 (0,4%) 2 (0,1%)
UNA VEZ 322 (18,3%) 832 (47,4%) 52 (3,0%) 4 (0,2%)
NUNCA 1364 (77,7%) 844 (48,1%) 1693 (96,5%) 1747 (99,5%)
Deseo de consumir la substancia Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
DIARIAMENTE O CASI DIARIAMENTE 11 (0,6%) 5 (0,3%) 2 (0,1%) 1 (0,1%)
SEMANAMENTE 29 (1,7%) 38 (2,2%) 4 (0,2%) 1 (0,1%)
UNA VEZ 152 (8,7%) 368 (21,0%) 22 (1,3%) 1 (0,1%)
NUNCA 1563 (89,1%) 1344 (76,6%) 1727 (98,4%) 1752 (99,8%)
Problemas ocasionados por el consumo Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
DIARIAMENTE O CASI DIARIAMENTE 1 (0,1%) 0 (0%) 0 (0%) 0 (0%)
SEMANAMENTE 8 (0,5%) 11 (0,6%) 2 (0,1%) 1 (0,1%)
UNA VEZ 86 (4,9%) 179 (10,2%) 8 (0,5%) 2 (0,1%)
NUNCA 1660 (94,6%) 1565 (89,2%) 1745 (99,4%) 1752 (99,8%)
Elaboración propia 3 X=1755

391 personas (22,3%) han consumido cigarrillo durante el último mes, de estos 92 (23,5%) son mujeres y 299 (75,5%) hombres. Por cada mujer que consume cigarrillos hay 3 hombres que lo hacen también. En alcohol, 911 (51,9%) indican haber ingerido bebidas alcohólicas de los cuales 374 (41,1%) son mujeres y 537 (58,9%) son varones con una razón de 1:1,4. Para cannabis, se registra consumo en 62 (3,5%) informantes (14(22,6%) mujeres y 48(77,4%) hombres, proporción 1:3,4). El consumo de cocaína muestra a 8(0,5%) estudiantes compuesto por 2(25%) mujeres y 6(75%) hombres.

192 (10,9%) informantes frecuentemente han sentido un fuerte deseo de consumo de tabaco de los cuales 39 (20,3%) son mujeres y 153 (79,7%) son hombres. Otros 411(23,4%) han experimentado deseo a alcohol en los que 143 (34,8%) son de sexo femenino y 268 (65,2%) masculino. 28 (1,6%) estudiantes registran deseo de consumo para cannabis de los cuales 7 (25%) son mujeres y 21 (75%) son hombres, y 3 (0,2%) hombres se identifican en necesidad de consumo para cocaína. La razón entre hombres y mujeres es: 1:3,9 en tabaco, 1:1,8 en alcohol, 1:3 en cannabis, y en cocaína no hay frecuencia femenina.

Para responder con qué frecuencia el consumo de la droga ha causado problemas en los estudiantes, el tabaco evidencia que 95 (5,4%) de los sujetos han presentado problemas de salud, sociales, legales o económicos. De estos individuos, 15 (15,8%) son mujeres y 80 (84,2%) son varones. En el alcohol, aparecen 190 (10,8%) alumnos entre los cuales 58 (30,5%) son de género femenino y 132 (69,5%) son masculino. Para el caso de cannabis, el número de participantes con problemas es de 10 (0,6%), de los cuales hay 2 (20%) mujeres y 8 (80%) hombres. Para terminar, la cocaína solo cuenta con 3 (0,2%) hombres. Al igual que en las dos dimensiones anteriores, los varones evidencian la mayor frecuencia de problemas derivados del consumo tal como lo indica las razones: 1:5,3 tabaco, 1:2,2 alcohol, 1:4 marihuana.

Resulta interesante que el número de hombres y mujeres con deseo de consumir tabaco, alcohol y marihuana resultó ser casi la mitad de la frecuencia de consumo en el último mes. El cincuenta por ciento de los estudiantes que consumieron estas substancias en los últimos 30 días, han sentido un fuerte deseo o ansias de fumarlas o ingerirlas. Esto podría indicar que, 46 mujeres y 150 hombres tienen algún grado de adicción al cigarrillo, 187 mujeres y 269 hombres al alcohol, y 7 mujeres y 24 hombres a la marihuana.

El alcohol, con algo más del 50%, es la droga que se ha consumido con mayor frecuencia en el último mes, seguida del tabaco con 22,3%, la marihuana con 3,5% y la cocaína con 0,5%. De la misma manera el alcohol registra el porcentaje más alto en el deseo de consumo con el 23,4%, delante del tabaco con 10,9%, cannabis 1,6% y cocaína 0,2%. Los problemas que son originados por el consumo siguen el mismo patrón, 10,8% para alcohol, 5,4% tabaco, 0,6% cannabis y 0,2% cocaína.

Otros factores relacionados al consumo de drogas

Tabla 4.
Factores relacionados al consumo de droga
Factores SI NO
PROBLEMAS DE ESTUDIOS 160 (9,1%) 1595 (90,9%)
CARRERA DE AGRADO 1667 (95,0%) 88 (5,0%)
GRUPOS AMIGOS ISTS 1280 (72,9%) 475 (27,1%)
ACEPTADO POR COMPAÑEROS 1645 (93,7%) 110 (6,3%)
COMPARTE PROBLEMAS CON COMPAÑEROS 786 (44,8%) 969 (55,2%)
SE PREOCUPA POR PROBLEMAS DE SUS AMIGOS 1407 (80,2%) 348 (19,8%)
PERTENECE A ORGANIZACIONES 125 (7,1%) 1630 (92,9%)
TRABAJA ACTUALMENTE 482 (27,5%) 1273 (72,5%)
CONFLICTOS LABORALES 53 (3,0%) 1702 (97,0%)
Elaboración propia4 X=1755

En cuanto al agrado de los participantes hacia la carrera, el 5% de la población no le agrada la carrera, el 6,3% no se siente aceptado, el 19,8% no se interesa por los problemas de los demás, el 27,1% no tiene grupos de amigos en la institución, el 55,2% no comparte sus problemas con compañeros, el 9,1% tiene problemas de estudios y tan solo el 7,1% pertenece a organizaciones. El 30% tiene trabajo y de este grupo, un 3% experimenta conflictos laborales.

Número de horas dedicadas al tiempo libre

Tabla 5.
Tiempo libre
TIEMPO LIBRE Lectura TV Deportes Arte Actividad Física
MÁS DE 3 HORAS 80 (4,6%) 100 (5,7%) 182 (10,4%) 47 (2,7%) 167 (9,5%)
ENTRE 1 A 3 HORAS 492 (28,0%) 463 (26,4%) 509 (29,0%) 207 (11,8%) 529 (30,1%)
ENTRE 0 A 1 HORA 973 (55,4%) 768 (43,8%) 753 (42,9%) 696 (39,7%) 871 (49,6%)
NO LE DEDICA TIEMPO 210 (12,0%) 424 (24,2%) 311 (17,7%) 805 (45,9%) 188 (10,7%)
TIEMPO LIBRE Fiestas Música Amigos y familiares Redes Paseos
MÁS DE 3 HORAS 930 (53,0%) 541 (30,8%) 175 (10,0%) 619 (35.0%) 157 (8,9%)
ENTRE 1 A 3 HORAS 498 (28,4%) 723 (41,2%) 484 (27,6%) 413 (24.0%) 352 (20,1%)
ENTRE 0 A 1 HORA 258 (14,7%) 463 (26,4%) 725 (41,3%) 434 (25.0%) 539 (30,7%)
NO LE DEDICA TIEMPO 69 (3,9%) 28 (1,6%) 371 (21,1%) 289 (16.0%) 707 (40,3%)
Elaboración propia5 X=1755

1428 (81,4%) de los participantes invierten su tiempo en fiestas y diversión. Este factor registró la mayor frecuencia. En segundo lugar, se posicionó el tiempo libre para la música con un total de 1264 (72,0%) estudiantes. A continuación, se encuentran las horas en redes sociales con 1032 (58,8%) de los registros totales, seguido de las horas de actividad física con 696 (39,7%), y de las horas destinadas a deportes con 691 (39,4%) respuestas afirmativas. El quinto lugar fue para amigos y familiares con 659 (37,5%), posteriormente, las horas de lectura con 572 (32,6%), horas de televisión con 563 (32,1%), paseos y excursiones con 509 (29,0%), y finalmente actividades artísticas con 254 (14,5%) de respuestas afirmativas.

Relación entre variables nominales de la encuesta socio económica con frecuencia, deseo y problemas de consumo

Tabla 6.
Variables nominales con frecuencia - deseo- problemas de consumo
DESEO DE CONSUMO ALCOHOL DESEO DE CONSUMO ALCOHOL
p V Cramer OR p V Cramer OR
MATERIAS REPETIDAS 2020 II ,0,039 0,064 1,5 INGRESO MENSUAL 0,000 0,113 -
DESEO DE CONSUMO TABACO DESEO DE CONSUMO ALCOHOL
p V Cramer OR p V Cramer OR
GÉNERO 0,000 0,16 - GÉNERO 0,000 0,09 -
AUTOIDENTIFICACIÓN 0,000 0,131 - AUTOIDENTIFICACIÓN 0,000 0,097 -
Elaboración propia5 El nivel de significancia fue de 0,05

De todas las variables sociodemográficas, las materias repetidas 2020 ii, el ingreso mensual, el género y la auto identificación étnica fueron estadísticamente significativas para deseo de consumo de alcohol y tabaco. El estadístico que mide la fuerza de la relación para variables nominales es la V de Cramer que en todos los casos arrojó valores de baja intensidad. No se evidenciaron probabilidades de ocurrencia significativos.

Inferencias estadísticas entre los factores de la encuesta de drogas con la frecuencia de consumo – deseo de consumo y problemas por el consumo

Tabla 7.
Factores de consumo y frecuencia de consumo
Frecuencia de consumo Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
p gamma OR p gamma OR p gamma OR p gamma OR
PROBLEMAS DE ESTUDIOS 0,199 - - 0,861 - - 0,824 - - 0,655 - -
CARRERA DE AGRADO 0,164 - - 0,012 0,052 - 0,038 0,262 - 0,032 0,463 -
GRUPOS AMIGOS ISTS 0,018 -0,097 - 0,225 - - 0,227 - - 0,394 - -
ACEPTADO POR COMPAÑEROS 0,589 - - 0,19 - - 0,804 - - 0,029 -0,6 5
COMPARTE PROBLEMAS CON COMPAÑEROS 0,376 - - 0,105 - - 0,183 - - 0,373 - -
SE PREOCUPA POR PROBLEMAS DE SUS AMIGOS 0,234 - - 0,28 - - 0,841 - - 0,025 0,6 -
PERTENECE A ORGANIZACIONES 0,822 - - 0,351 - - 0,000 -0,5 - 0,004 -0,7 -
TRABAJA ACTUALMENTE 0,003 -0,2 - 0,141 - - 0,903 - - 0,07 - -
CONFLICTOS LABORALES 0,006 0,3 2 0,000 0,194 - 0,19 - - 0,002 0,64 -
Elaboración propia

Existieron 12 relaciones estadísticamente significativas entre factores asociados al consumo con la frecuencia de consumo. Los problemas de estudios, y el compartir problemas con compañeros, no registraron ninguna asociación. La fuerza inferencial fue baja para tabaco y alcohol, mientras que para cannabis y cocaína es media y alta. La direccionalidad de Gamma confirma la hipótesis de investigación en las 12 asociaciones. La dirección negativa de Gamma en cigarrillo, indica que los informantes sin trabajo y con menor cantidad de amigos en el ISTS, tienden a consumir más tabaco. Con referencia a la probabilidad, los conflictos laborales aumentan en 2 veces más el consumo de tabaco, y la falta de aceptación de los compañeros incrementa en 5 veces el consumo de cocaína.

Inferencias entre factores de consumo y deseo de consumo

Tabla 8.
Factores de consumo y deseo de consumo
Deseo de consumo Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
p gamma OR p gamma OR p gamma OR p gamma OR
PROBLEMAS DE ESTUDIOS 0,54 - - 0,53 - - 0,032 0,09 - 0,017 0,66 -
CARRERA DE AGRADO 0,066 - - 0 0,134 - 0,008 0,4 - 0 0,9 -
GRUPOS AMIGOS ISTS 0,97 - - 0,5 - - 0,24 - - 0,77 - -
ACEPTADO POR COMPAÑEROS 0,301 - - 0,152 - - 0,451 - - 0,002 0,7 -
COMPARTE PROBLEMAS CON COMPAÑEROS 0,457 - - 0,518 - - 0,493 - - 0,414 - -
SE PREOCUPA POR PROBLEMAS DE SUS AMIGOS 0,38 - - 0,64 - - 0,311 - - 0,209 - -
PERTENECE A ORGANIZACIONES 0,024 -0,26 - 0 -0,122 - 0 -0,6 - 0,004 -0,7 -
TRABAJA ACTUALMENTE 0,215 - - 0,448 - - 0,686 - - 0,334 - -
CONFLICTOS LABORALES 0,095 0,000 2 0,347 - - 0,062 - - 0 0,8 16
Elaboración propia

Las amistades, los compañeros y el trabajo no registran relación significativa con el deseo de consumo en las 4 substancias. De las 11 inferencias la participación en organizaciones se relacionó con el deseo de consumo de tabaco, alcohol, cannabis y cigarrillo. Una vez más la fuerza de inferencia para tabaco y alcohol fue baja, mientras que cannabis y cocaína es alta y media. En todas las asociaciones se comprueba la hipótesis de investigación. La dirección negativa de las 4 substancias en el factor de pertenece a organizaciones, indica que la necesidad de consumo se intensifica en virtud de la no afiliación del estudiante a una organización. Los conflictos labores aumenta el deseo del uso de cigarrillo hasta en 2 veces más, y hasta 16 veces más para el consumo de cocaína.

Inferencias entre factores de consumo y problemas derivados del consumo

Tabla 9.
Factores de consumo y problemas derivados del consumo
Problemas por consumo Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
p gamma OR p gamma OR p gamma OR p gamma OR
PROBLEMAS DE ESTUDIOS 0,87 - - 0,032 0,28 - 0,018 0,623 - 0,126 - -
CARRERA DE AGRADO 0,7 - - 0,756 - - 0,012 0,36 - 0 0,811 -
GRUPOS AMIGOS ISTS 0,941 - - 0,583 - - 0,553 - - 0,573 - -
ACEPTADO POR COMPAÑEROS 0,003 0,1 - 0,015 0,14 - 0,029 0,58 - 0,001 0,76 -
COMPARTE PROBLEMAS CON COMPAÑEROS 0,296 - - 0,357 - - 0,946 - - 0,534 - -
SE PREOCUPA POR PROBLEMAS DE SUS AMIGOS 0 0,36 - 0,002 0,29 - 0,355 - - 0,498 - -
PERTENECE A ORGANIZACIONES 0,78 - - 0,944 - - 0,009 -0,7 - 0,06 - -
TRABAJA ACTUALMENTE 0,381 - - 0,751 - - 0,494 - - 0,183 - -
CONFLICTOS LABORALES 0 0,58 3,8 0 0,33 - 0 0,56 - 0 0,88 -
Elaboración propia

Mientras que los grupos de amigos y el trabajo no se relacionaron con problemas derivados del consumo de las substancias, la aceptación por los compañeros y los conflictos laborales fueron los de mayor influencia. El alcohol y tabaco presenta fuerza inferencial media y baja, mientras que cannabis y cocaína registran fuerza alta. Los conflictos laborales incrementan la probabilidad de problemas derivados del consumo de tabaco hasta en 3,8 veces más.

Uso del tiempo libre relacionado con la frecuencia de consumo

Tabla 10.
Tiempo libre y frecuencia de consumo
Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
Uso tiempo libre p gamma OR p gamma OR p gamma OR p gamma OR
HORAS DE LECTURA 0,315 - - 0,247 - - 0,007 -0,36 - 0,567 - -
HORAS TV 0,052 - - 0,204 - - 0,031 -0,037 - 0,534 - -
DEPORTES 0,02 -0,188 - 0,154 - - 0,506 - - 0,742 - -
ARTE 0,511 - - 0,06 - - 0,018 -0,321 - 0,493 - -
EJERCICIO 0,214 - - 0,296 - - 0,117 - - 0,463 - -
FIESTAS 0 0,324 2 0 0,419 2,5 0,126 - - 0,406 - -
MÚSICA 0,098 - - 0,102 - - 0,007 -0,46 - 0,969 - -
VISITA FAM 0,648 - - 0 -0,158 - 0,622 - - 0,248 - -
REDES SOCIALES 0,058 - - 0,065 - - 0,792 - - 0,649 - -
PASEOS EXCURSIONES 0,000 -0,157 0 0,022 -0,111 - 0,14 - - 7,14 - -
Elaboración propia

Existieron 10 inferencias con las substancias con excepción de cocaína con una intensidad de baja y media. A mayores horas de música de lectura, tv y actividades artísticas, el consumo de cannabis disminuye. La práctica de deportes y excursiones influye en la disminución de consumo de tabaco, pero la mayor exposición de fiestas la intensifica. Las visitas a familiares y las excursiones, reducen el consumo de alcohol, mientras que las fiestas la aumentan. De hecho, los estudiantes expuestos a fiestas tienen 2 veces más probabilidad de consumo de tabaco y 2,5 veces más probabilidad de consumo de alcohol.

Uso del tiempo libre relacionado deseo de consumo

Tabla 11.
Tiempo libre y deseo de consumo
Tabaco Alcohol Cannabis Cocaína
Deseo de consumo p gamma OR p gamma OR p gamma OR p gamma OR
HORAS DE LECTURA 0,374 - - 0,017 -0,133 - 0,187 - - 0,249 - -
HORAS TV 0,26 - - 0,122 - - 0,028 - - 0,313 - -
DEPORTES 0,061 - - 0 -0,189 - 0,578 - - 0,343 - -
ARTE 0,483 - - 0,264 - - 0,382 - - 0,375 - -
EJERCICIO 0,027 -0,153 - 0,075 - - 0,175 - - 0,653 - -
FIESTAS 0 0,338 2 0 0,409 2,3 0,255 0 - 0,538 - -
MÚSICA 0,017 -0,196 - 0 -0,222 - 0,007 -0,674 - 0,373 - -
VISITA FAM 0,343 - - 0,118 - - 0,496 - - 0,683 - -
REDES SOCIALES 0,017 -0,174 - 0 -0,241 - 0,348 - - 0,369 - -
PASEOS EXCURSIONES 0,315 0 - 0,281 0 - 0,574 0 - 0,642 - -
Elaboración propia

No existieron inferencias entre tiempo libre y problemas de consumo. La intensidad de las relaciones fue baja para tabaco y alcohol con excepción en el tiempo destinado a fiestas en dónde Gamma tuvo una fuerza media. A mayor tiempo de dedicación a las actividades de ejercicio, a la música y a las redes sociales, disminuye el deseo de consumo de tabaco. A mayor hora de lectura, deportes, música y redes sociales, disminuye también el deseo de consumo de alcohol. Existe una relación positiva entre la exposición a fiestas y el deseo de consumir tabaco y alcohol. En este mismo sentido, los participantes tienen una probabilidad de incrementar su deseo de consumo en hasta 2 veces más para tabaco, y hasta 2,3 veces más en alcohol. La actividad de escuchar música está inversamente relacionada con el consumo de cannabis.

Ninguna de las 10 inferencias se relacionó con cocaína.

Discusión

Las cifras que la OMS (2017) advierte sobre el consumo de tabaco indican la diferencia entre hombres y mujeres, y es que por cada mujer que fuma existen 4 hombres que lo hacen a nivel mundial. El razonamiento a este hecho está en la dinámica de los efectos de recompensa de la dopamina que en los hombres se activa de mejor manera (NIH, 2020). Según se ha citado, el consumo de alcohol también es superior en varones que en mujeres sin que haya diferencias significativas por grupos etarios. Gómez (2018) investigó la prevalencia de alcohol en 234 jóvenes universitarios de Jalisco México analizando la frecuencia de consumo y el tipo de bebida alcohólica. En todos los análisis la mujer presentó menor exposición al licor. A decir del autor, la afectación que causa el alcohol, perjudica más a la mujer porque en su composición corporal hay mayor concentración de grasa y menor porcentaje de agua, además de una digestión más aletargada en comparación con el hombre. Esta interpretación sumada a otros factores socioculturales cómo los estereotipos de género, explican las relaciones del consumo entre hombres y mujeres obtenidos en estas investigaciones y las del presente estudio. El consumo de las drogas psicoactivas cannabis y cocaína, también tienen en el hombre a su mayor consumidor y de acuerdo con Callado (2011), la razón recae en la mayor sensibilidad de la mujer por los efectos sobre el estrógeno y la progesterona.

Las personas con un deseo de consumo alto corresponden a la mitad de quienes presentaron en el último mes alta frecuencia de consumo en tabaco, alcohol y cannabis. Para López (2012), la frecuencia de consumo en el último mes no necesariamente explica el deseo, necesidad o pulsión, ni tampoco se puede determinar características de dependencia. En este sentido, la mitad de los consumidores que coinciden con deseo alto de consumo deben ser analizados en ulteriores estudios para confirmar esta posible asociación.

El alcohol es la droga que más se consume en los estudiantes del ISTS seguida del tabaco, marihuana y cocaína. Estas dos últimas no llegan a más del 4% de los informantes. En un estudio sobre alcohol, cigarrillo y drogas ilícitas realizado por Morales (2019) en un preuniversitario de Perú, el licor resulta ser la droga de mayor frecuencia seguido del cigarrillo con valores similares a los registrados en la tabla 3. En la muestra en donde además participaron 815 adolescentes el consumo de la cocaína obtuvo el tercer puesto con 7% y después la marihuana con 0,7%. Sin embargo, Sepúlveda (2011) descubrió una prevalencia de consumo de cocaína de 5,3% y de marihuana de 44,1% en 1577 estudiantes universitarios chilenos. Otro estudio al respecto, esta vez realizado en Colombia por Tirado (2012) sobre una muestra de 1264 estudiantes universitarios, puntúa el consumo de la marihuana (4,7%) por encima de la cocaína (2%). Estos registros sobrepasan la frecuencia de consumo de las substancias sujetas a fiscalización y confirman el mayor consumo de marihuana sobre cocaína. El deseo de consumo de substancias estupefacientes en los estudios de Gómez (2018), Callado (2011), López (2012), Morales (2019) y Tirado (2012) registró mayores valores para el alcohol, seguido del tabaco, marihuana y cocaína. Ninguno de los instrumentos de medición utilizados fueron específicos para conducta adictiva.

En referencia a la relación de variables sociodemográficas con la frecuencia y el consumo de estupefacientes, Camacho (2005) encontró que el género y el rendimiento académico se relaciona estadísticamente con el consumo de alcohol en una población de 618 estudiantes universitarios. Otros datos nominales como la raza, trabajo fijo, el ingreso económico no fueron significativos. Comparando estos resultados con los del presente estudio, hay que recalcar que el sueldo, las materias reprobadas del semestre anterior, el género y la autoidentificación étnica tuvieron relación con el deseo de consumo de alcohol y tabaco, en todas ellas con una fuerza baja y sin valor predictivo.

Para Muñoz (2014), el consumo de tabaco en adolecentes a partir de los 16 años, está directamente relacionado con la existencia de familiares que fumen y no por el nivel académico, el aspecto laboral, la práctica de deportes, y la asistencia a fiestas. En este mismo aspecto Villena (2009), en un estudio de 146 adolescentes, concluye que el hábito de consumo de tabaco se incrementó por la exposición a la substancia a través de los padres fumadores (OR:11,3), ausencia de actividades físicas (OR:3,3), disponibilidad de dinero, y el número de asignaturas aprobadas. Estos datos difieren a los encontrados en los estudiantes del ISTS, ya que los factores que ejercen influencia fueron la presencia de los compañeros, la falta de un empleo (OR:2) y los conflictos laborales. Pueda que las diferencias obedezcan a la mayor libertad que tienen los estudiantes al cumplir la mayoría de edad y la ocupación laboral. En una investigación en la que se determinó el grado de asociación del consumo de alcohol en 849 estudiantes universitarios realizado por Betancourth (2017), los factores relacionados fueron los amigos, la familia y el género antes que el agrado de la carrera o conflictos laborales. El consumo de alcohol en el último mes se registró en 25,8% que es la mitad del consumo total de licor medido en el ISTS.

En cuanto al consumo de marihuana Martínez (2016), halló la prevalencia de los factores asociados al consumo de cannabis en una universidad pública de Colombia, y demostró que el consumo de cigarrillo (OR:23) y la edad de 20 – 21 años (OR: 3,05) estuvieron inferenciados. Así también, Martínez-Tórres (2015) elaboró una investigación sobre la prevalencia de factores en el consumo de cannabis en 814 adolescentes y descubrió que el género, la edad (18-19 años), el estrato social, el nivel académico de los padres y el consumo de cigarrillo provoca un mayor consumo de marihuana. En la investigación del ISTS las variables como el agrado de la carrera y la pertenencia a organizaciones resultaron ser estadísticamente significativas con una intensidad media y baja respectivamente. En ninguno de los anteriores resultados se confirmaron valores significativos de OR.

Los estudios de factores predisponentes al consumo de cocaína presentan poblaciones drogo dependientes como por ejemplo el realizado por Berbesi (2016) en una población mayor a 18 años en Colombia. En esta elaboración científica, se ha demostrado que la edad (18-25 años) OR:1,26 y estratos sociales bajos OR:1,43 aumentan la probabilidad de consumo. Los datos arrojados en el estudio del ISTS muestran relaciones entre los problemas de estudio, el agrado de la carrera, la aceptación de los compañeros, la no pertenencia a organizaciones y los conflictos (OR: 16) laborales como elementos relacionados. Estos resultados responden a 3 estudiantes quienes tienen consumo habitual al estupefaciente.

Conclusiones

Las variables socio demográficas como el género, la etnia, las materias repetidas en 2020 y el ingreso mensual influyen el consumo de tabaco y alcohol con baja intensidad y sin presentar asociación predictiva OR. Los factores que se relacionan más en el consumo, deseo y problemas derivados del uso de las substancias estupefacientes fueron: el desagrado a la carrera, la no pertenencia a organizaciones, los conflictos en el trabajo, los problemas de estudio y la aceptación por los compañeros. En cuanto a las asociaciones encontradas en el consumo de tabaco, las personas con conflictos laborales tienen el doble de probabilidad de deseo de consumo y 3,8 veces más problemas derivados del uso de esta substancia. Se registraron 3 personas que consumen cocaína en el instituto. La poca aceptación social que experimentan en la institución, incrementa en 5 veces su consumo y los conflictos laborales en 16 veces su deseo de esta droga.

En cuanto a las actividades de ocio, el mayor tiempo que los jóvenes dedican a la música, a la televisión y al arte, disminuye el consumo de cannabis; y, por otro lado, los deportes, las visitas a familiares y las excursiones previenen el consumo de tabaco y alcohol. Se evidenció que las reuniones sociales, las celebraciones y fiestas se relacionan directamente con el consumo de alcohol y cigarrillo intensificando la probabilidad de consumo de tabaco hasta en 2 veces más, y de alcohol en hasta 2,5 veces más. Así mismo, los participantes expuestos a las fiestas duplican la intensidad del deseo de consumo de alcohol y cigarrillo.

La droga de mayor consumo en los estudiantes del ISTS es el alcohol, seguido del cigarrillo, la marihuana y la cocaína. En todos los resultados, es el hombre quien presenta mayor frecuencia y deseo de consumo. No fue posible describir el grado de dependencia de las substancias en este estudio. Los indicadores pedagógicos muestran que desde 2017, se ha disminuido el porcentaje de aprobación de materias, aunque desde el 2020, los indicadores han presentado un leve mejoramiento. Esta situación ha sido vinculante con un ligero aumento en el consumo de alcohol.

Las actividades que más practican los informantes en el ISTS son las fiestas, escuchar música, las redes sociales, la práctica de ejercicio - deportes, la visita a familiares, la lectura, la televisión, los paseos y las actividades artísticas. De todas estas, se debe considerar a la música, la televisión, el arte, los deportes, y las excursiones en el diseño de actividades de mitigación de consumo droga, debido a que estos son factores protectores o eugenésicos que disminuyen la probabilidad del deseo y consumo de marihuana, alcohol y cigarrillo (tabla 10 y 11).

Agradecimientos

Autoridades

Los autores agradecen a las autoridades del Instituto Superior Tecnológico Sucre por la autorización para el desarrollo de la investigación

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Información adicional

Como citar: Noroña Salcedo, D., Mosquera Hernández, V., & Laica Hernández, V. (2021). Factores de riesgo asociados al uso y consumo de drogas en estudiantes del Instituto Superior Tecnológico Sucre. Ecuadorian Science Journal, 5(3), 12-26. DOI: https://doi.org/10.46480/esj.5.3.141

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